La guerra de los mundos
La guerra de los mundos: un clásico en ciencia ficción muy recomendable
Novela escrita en 1897 que narra la invasión de Gran Bretaña por unos marcianos.
Los habitantes de Marte, parecidos a pulpos gigantes, caen con sus naves en distintos puntos de la campiña inglesa y desde allí, subidos en unos trípodes metálicos y dotados de unos rayos ardientes y un gas negro venenoso, logran conquistar todo el país, provocando el pánico entre la población.
El protagonista y narrador principal de esta invasión es un ciudadano inglés, que alterna su relato de la ocupación de la campiña, con la narración de su hermano, que se encuentra en Londres y debe huir hacia la costa.
Cuando uno lee este libro se da cuenta de que este argumento ya lo conoce de otras novelas y de infinidad de películas de ciencia ficción. Todas copiaron la mayoría de sus ideas de «La guerra de los mundos». Incluso los rayos láser que se usan en «La guerra de las galaxias» ya aparecen aquí como un rayo ardiente, que extermina todo lo que se interpone en su camino. Y diecisiete años después de su publicación, en la Primera Guerra Mundial se usaron gases venenosos, similares a los de los marcianos.
Novela muy original en su época, en la que las damas victorianas se entretenían con otro tipo de libros románticos y de amoríos, y no se planteaban la posibilidad de ver el jardín de su castillo invadido de marcianos.
El actor Orson Welles adaptó en 1938 la obra como guión de radio, y lo dramatizó tan bien que los radioescuchantes pensaron que la invasión era real. Cundió la histeria colectiva entre la población y se colapsaron las llamadas a las comisarias y periódicos.
En el año 2005 se estrenó la última película basada en la novela, protagonizada por Tom Cruise.
H. G. Wells publicó otros libros de gran éxito como «El hombre invisible», «La máquina del tiempo» o «La isla del doctor Moreau» que también han sido llevadas a la gran pantalla.
Autor: H. G Wells
Título original (en inglés): «The War of the Worlds»
Editorial en España: Anaya, 1984 (Traducción de Ramiro de Maeztu)
Valoración: Muy bueno.
«De todos modos, esperemos o no nuevas invasiones, estos acontecimientos nos obligan a modificar grandemente nuestras miras sobre el porvenir de la humanidad. Hemos aprendido a no considerar en lo sucesivo nuestro planeta como segura en inviolable morada del hombre; nunca sabremos prever qué bienes o qué males invisibles pueden sobrevenirnos del espacio. Es posible, en los amplios designios del Universo, que no deje al fin de beneficiarnos la invasión marciana; se nos ha arrancado esa confianza tranquila en el porvenir que es la fuente más segura de degeneración…»